Una capilla del humo es un pedazo de equipo de laboratorio que se utilice para proteger a científicos contra los efectos negativos posibles de un experimento. Esto es hecha sobre todo guardando el aire dentro de la capilla del humo lejos de la gente que hace el experimento. Las capillas del humo también ofrecen otras características y protecciones que sean útiles en un ajuste del laboratorio.
Las capillas del humo tienen características físicas distintas. La base de la capilla del humo parece generalmente un banco de laboratorio típico, y puede tener almacenamiento incorporado a ella, sobre el piso. Encima de y conectado con el banco es un recinto muy grande llamado un gabinete. El gabinete tendrá una puerta movible, o marco, en el frente que se puede aumentar o bajar para proporcionar el acceso a la porción del worktop de la capilla del humo. Las aberturas alrededor de los bordes del worktop y/o en la cima del gabinete permiten el retiro de gases en el gabinete. Los experimentos se realizan dentro del gabinete con el marco tan bajo como posible para proteger a los experimentadores.
Las capillas del humo proporcionan la protección contra más que apenas los gases peligrosos. La naturaleza incluida del gabinete ayuda a proteger a experimentadores contra el daño por la ruina si algo estalla o salpica. Las capillas del humo también se hacen generalmente de materiales ignífugos, así que los fuegos inesperados tienden a no ser tan perjudiciales como estarían en una zona abierta.
